¡¡Tú no eres sordo!!

Quiero compartir con Uds esta historia completamente real, mi amigo Richie Eslava, está en plenos trámites para sacar su certificado de discapacidad a fin de inscribirse en el CONADIS.

El realiza sus trámites en el hospital "Santa Rosa" de Pueblo Libre, precisamente el día de su última cita, (despues de haberse realizado los exámenes correspondientes de visión, audición, corazón, etc), el 3 de septiembre pasado con la Dra. Julia Balarezo Santillán - Medico Rehabilitador, al entrar al consultorio, la Dra. le hace la pregunta de rigor:

-¿Para qué deseas obtener el certificado de discapacidad?

-Para inscribirme en el CONADIS y poder trabajar despúes

-¿Queeeeeeé?, estás loco, ¡¡¡TÚ NO ERES SORDO¡¡¡

-??????

-Un sordo no puede oir, tu oyes con audifonos....

.....despúes de un corto intercambio de palabras, la Dra. le pidio que la próxima trajera su audiometría.

No sabía que un sordo que mejora su audición y/o comunicación con el apoyo de un audifono o lectura labial, automaticamente dejaba de serlo. ¿No se supone que si Richie fuera oyente, como dió a entender la "Doctora", no tendría necesidad de usar audifonos?. ¿Se puede llamar Dra. a una persona que trabajando con personas con discapacidad tenga tan poco conocimiento sobre ellos?.

Lamentablemente esta historia no hace sino desnudar una realidad latente: la mayoría de profesionales y no profesionales que trabajan con personas con discapacidad, tiene muy poco conocimiento sobre el tema, no solo desconocen los diferentes tipos de discapacidad y su clasificación, sino también no saben la manera adecuada de comunicarse o tratar a las personas segun su discapacidad, desconocen su psicología y necesidades entre otras; por si esto fuera poco no reunen el perfil adecuado para trabajar en ese rubro, ya que carecen de las cualidades necesarias como: paciencia y vocación de servicio.

En mi paso por algunas instituciones del rubro en calidad de usuario, pude corrobar todo lo escrito anteriormente, así como tambien me topé con muy buenos profesionales, sin embargo aún hay mucho por hacer.